Mientras que existen bebés a los que viajar en coche les encanta y, solo con oír el ruido del motor, se quedan dormiditos todo el camino, también hay otros a los que viajar en coche les horroriza y se pasan todo el camino llorando. Por ello, te daremos algunos consejos para que el viaje sea más tranquilo y puedas ayudar a calmarlo hasta que ya se vuelva un hábito de costumbre.
1. Pequeños cambios, pequeños avances
Es difícil saber el motivo por el que el bebé entra en pánico cuando se sube al carro, pero para ellos debemos revisar algunas cosas antes de iniciar el trayecto.
Una de las causas que puede estar alterando el estado de ánimo de tu bebé en el coche es la temperatura, así que intenta que el pequeño no vaya excesivamente abrigado durante los trayectos. Es suficiente con que lleve una prenda no muy gruesa, teniendo en cuenta que la propia sillita y los arneses pueden darle calor.
También puedes probar a llevarte la sillita de auto a casa para que se familiarice con ella unos días. De esta manera, se convertirá en un objeto conocido y cotidiano y es probable que sentarse en ella no le angustie tanto.
En paralelo, te recomendamos realizar pequeños trayectos para que se vaya acostumbrando a viajar en coche, incrementando la duración de los desplazamientos poco a poco.
2. Entretenimiento sobre 4 ruedas
Si en el carro viajas con otra persona, uno de ellos puede acompañar al pequeño en el asiento trasero para que no se sienta solo. Iniciar la marcha junto a mamá, papá o un hermano puede tranquilizarle y hacer que se sienta más relajado.
3. Juguetes y música para entretener al pequeño en los trayectos
Otra buena opción es cantarle o poner una música que le guste. Amenizar el viaje con un recopilatorio de canciones infantiles o, incluso, de música relajante es una buena alternativa, además de muy educativa.
Los juguetes también pueden ser un gran aliado. Lleva algunos de los que más le gustan cuando se desplacen en el carro para que viaje entretenido: peluches, sonajeros, juguetes sonoros y luminosos.
Seguridad en carretera
Lo primordial es la seguridad. Por eso es vital mantener la calma, aunque lloren, y no intentar realizar maniobras peligrosas para intentar calmarles. Es mucho mejor buscar un área donde estacionar de manera segura para calmar al bebé y reanudar de nuevo la marcha.
Estas paradas también serán muy beneficiosas para evitar la asfixia postural de los bebés. La posición prolongada de los pequeños cuando viajan en coche hace que aumente el riesgo de bradicardia, apnea y desaturación de oxígeno. Por eso conviene hacer pequeños descansos de 15 o 20 minutos para que descansen y cambiarles de posición un rato.
Fuente: https://www.bebesymas.com/momentoschicco/mi-bebe-llora-en-cuanto-sube-al-coche-que-hago
